Todos los 13 de junio se celebra el día de San Antonio, fieles devotos elevan sus oraciones pidiendo por infinidad de cosas, que someten a la divinidad del santo, para así mediante un acto de fe, ver realizado el milagro con el correspondiente pago de la promesa posterior. En la ciudad del Tocuyo, estado Lara. Se practica una expresión folklórica llamada el TAMUNANGUE, baile representativo de la zona, y con el que de manera particular se paga las promesas a San Antonio, luego de las oraciones, se realiza el baile de la batalla, el cual es una coreografía, que simula una pelea a garrotes, entre los participantes al ritmo de la música cuya letra describe dicho encuentro. Esto en presencia de la imagen del santo o frente a su altar, particularmente decorado para la ocasión. Pero también está la otra historia, la que va de boca en boca, de generación en generación, que atribuye cierto don al santo, para conseguirles novio a las damas, las cuales se encomiendan a él con sus oraciones, También están las más osadas las cuales aunado a esto, colocan a San Antonio boca abajo, pensando que así el resultado se verá más rápido. Como dicen las abuelas, el problema está en que los novios que provee el santo son muy difíciles, incorregibles y de mal carácter. ¿Existirá alguna razón para tal creencia? ¿En dónde está la falla? ¿Porque lo obtenido no es del todo lo deseado?
Para 1951 apareció por primera vez en español la edición del libro El sermón del monte del Dr. Emmet Fox, el cual llego a mis manos alrededor del año 1982, este libro marco mi adolescencia, ya que me planteo el hecho de ser positivo como una acción, con consecuencias en mi vida, pero lo que más recuerdo, es cuando explica de Mateo 5: 3-12 - Bienaventurados los mansos: porque ellos poseerán la tierra. (Versículo 4) – Que Moisés era el hombre más manso sobre la tierra, y no en el concepto que tenemos de manso por estas tierras, afirma que en la traducción del hebreo, manso significa que sabe orar, por ello todo lo que Moisés pedía u oraba se le concedía, de allí que si se sabe pedir, lo más probable es que se obtengan los mejores resultados.
Cuando una mujer le pide a San Antonio una pareja, y que en medio de la oración le dice, hay San Antonio, no importa si el bebe, pero que me quiera, no importa si no es bien parecido, pero que me haga sentir o simplemente le dice no importa en que trabaje, lo importante es que quiera estar conmigo y que tenga carácter. Lo más probable es que le envié un novio borracho, poco agraciado, sin mucha disposición al trabajo y por supuesto de mal carácter.
El secreto está en saber pedir, como con nuestro país, debemos tener cuidado con lo que deseamos, porque puede ser que se nos cumpla, orar en armonía y pidiendo la paz para todos, sería un buen comienzo. Y a las chicas pendientes con lo que piden, bien se les puede dar.