Los colonos en las diferentes culturas, siempre han sido hombres de admirar, la búsqueda de la tierra prometida, los éxodos, la exploración, el manejo de condiciones extremas, la confianza en sí mismos, la paciencia y la fe para construir algo de la nada, y que perdure para las generaciones futuras, son tan solo una parte de lo que debe tener, quien da un salto al vacío haciendo de su proyecto de vida establecerse y producir donde nada es fácil, donde otros no quieren ó pueden llegar. Venezuela no es un caso aparte, la conquista del país, no solo es Páez y sus lanceros, ó Bolívar y su caballo, la verdadera conquista esta en producir alimentos en tierras inhóspitas, arriesgar la vida en construir hasta llegar al punto de excelencia luego de varias generaciones.
Para 1953 durante el gobierno del Presidente Marcos Pérez Jiménez y dentro del Plan Arrocero iniciado en 1948. Se deforesta una selva densa trayendo a inmigrantes europeos de veintisiete nacionalidades, quienes huyendo de la guerra vinieron hasta aquí con la seguridad de que podían, a pesar de las escasas condiciones salir adelante, producir y darles un futuro a sus descendientes, es de recordar que se planifico y se hizo el espacio en tierras del gobierno para llevar adelante una acción estratégica, que desde hace mucho ha estado dando frutos - Cereales- al país, allí no se eligió expropiar a los pocos que ya producían Arroz, maíz y sorgo, allí se incentivo la producción y se buscaron nuevas posibilidades.
Por otro lado en el área del sur del Lago, entre las estados Mérida y Zulia, y particularmente en el eje El Vigía Santa Bárbara los pioneros criollos comenzaron sin apoyo de un plan nacional, en tierras anegadizas, sufrieron hambre, paludismo, pérdidas de cosechas, ganado y muchas veces de esperanza al llegar la época de lluvias, con el tiempo invirtieron todo en canalizaciones, mejoras de cultivos, adquirieron la experiencia sobre el mejor ganado para la zona, hasta convertirse luego de tres generaciones de productores, el punta de lanza de la eficiencia productiva del país, ya que de cada dos reses que va a matadero una proviene de la zona, y más del 80% de los plátanos que se producen son de allí.
Hasta ahora no había problema con esto, pero aunque la incredulidad es libre el problema es el plátano, - ¿Cómo el plátano?- si y no es una pelea de comadres, resulta que en pro de solidificar los convenios de compras de armas con Rusia, se han firmado una serie de acuerdos -Entregas- como el plátano-convenio, ¿cómo es esto?
"El convenio entre Rusia y Venezuela consiste en sembrar 20 mil hectáreas de banano, en un plazo de diez años. Esto es posible porque el Sur del Lago cuenta con una potencialidad de tierras para poder producir este rubro y abastecer al mercado nacional e internacional", Luis Antonio Ruda, alcalde del municipio Francisco Javier Pulgar, del estado Zulia.
Ahora pregúntense, ¿El gobierno va a buscar preparar tierras para fundar siembras de plátanos y bananos?, pues no , por esto la primera negociación es ser productor exclusivo del estado, para no quitarte la finca, pero todos saben que hay que resistir, porque después lo que viene es mitad y mitad, Половину Платано ó Medio Plátano en Ruso
